De libros y bicicletas

  «Pasó delante de él en su bicicleta, con un cesto de mimbre repleto de libros, su pelo volaba hacia atrás, hacia donde él estaba parpadeando como en un sueño. Fue un instante breve, casi irreal, el de una estrella fugaz a punto de desaparecer y a la vez, quedarse para siempre». Mañanas que se...