Barcelona, abril de 2015

Durante la edición de este año hemos tenido muchas y gratas sorpresas. Todos los ejemplares de MANDARINAS DE PAPEL se han agotado a primera hora de la tarde. En cuanto a NUBES DE AZAFRÁN se han continuado vendiendo hasta la hora de cierre.

A pesar de las previsiones sobre los hábitos de lectura, muchas personas deseaban adquirir varios libros. No parece que el libro en papel vaya a desaparecer, al menos no de forma inmediata si tenemos en cuenta la multitudinaria afluencia de este año.

 

 

Los lectores que han visitado nuestro stand, buscaban algo de novela romántica y que a su vez fuera una aventura con una buena trama y documentación histórica. Mandarinas de papel reunía todos estos estilos literarios y además una conclusión de estilo ficción, fantástico.

El trabajo de diez años de investigación, en una época en que aún no existía Internet ni las redes sociales y que todo el trabajo de campo se realizaba a pie y anotando cada detalle en una libreta.

En cuanto a Nubes de azafrán, ha tenido una mayor acogida entre el público joven por su dinamismo descriptivo como thriller de acción y ambientaciones. Aunque también deseaban adquirirlo aquellos que ya habían leído mi primera obra.

A todas aquellas personas que han confiado en mis relatos, muchas gracias.